Una de las preocupaciones más importantes en materia de salud mental y de desarrollo cognitivo del menor se genera por el abuso, cuando no la adicción, a las redes sociales, a cualquiera de ellas. Un fenómeno que, aunque afecta a todas las edades, se ve con especial preocupación entre la población de 6 a 25 años, según las encuestas y los estudios de los profesionales de la psicología infantil.

Son muchos los que se atreven a afirmar que, sin duda, estamos ante un nuevo concepto, un nuevo fenómeno, las drogas digitales: el consumo desmedido y sin control de las redes sociales. Y lo que es más grave, cada vez se detecta el fenómeno en edades más tempranas, lo que conlleva mayores riesgos en su desarrollo mental y emocional.

La preocupación es tal en estos momentos que son muchas las administraciones y entidades abordando con estrategias claras este asunto. El mismo Ministerio de Educación ha editado una guía en este sentido para orientar tanto a los jóvenes como a los padres. Esta guía ‘Influencia del Uso de los Medios Sociales en el desarrollo del menor’, es un documento de interés que ofrece información útil en esta materia y advertencias severas sobre el efecto negativo que genera entre los más jóvenes.

Es cierto que no hay una definición de adicción, pero las psicólogas infantiles de Instituto Alcaraz advierten que estamos en esta situación o en riesgo de alcanzarla cuando el menor pierde el control, le afecta a su estado anímico, su comportamiento, intensifica su aislamiento social, reduce su rendimiento escolar y la ausencia de su dispositivo se convierte en fuente de ansiedad, depresión, agresividad u otros comportamientos anómalos.

Actuar rápido y actuar asesorado por profesionales para combatir esta situación es importante, ya que la adición de las redes sociales termina generando los mismos efectos que cualquier otra droga, entre ellos como el síndrome de abstinencia. Todo ello porque las redes sociales están diseñadas para atrapar al consumidor y lograr que centre su atención en estas herramientas. Para ello, se genera a través de logaritmos y sistemas que “atrapen y enreden” al usuario de las redes sociales, donde el éxito es que pase el mayor tiempo conectado a su dispositivo.

Y es que están diseñadas para ello, las redes sociales generan contenidos personalizados a cada uno de los perfiles de usuarios, gracias a la formulación de los algoritmos que ofrece lo que cada uno quiere, desea o busca. Además, están configurados para ser productos breves para evitar la dispersión mental, es gratuito e ilimitado. Todo ello pensado y diseñado para despertar la generación de dopamina, una sustancia natural que ofrece recompensa inmediata del que – de manera inconsciente – se alimenta el cerebro.

Y cuando caemos en las redes de los logaritmos, el menor muestra comportamientos vinculados a la pérdida de atención, falta de concentración, de memoria y retención, entre otros efectos negativos. Es común la bajada en el rendimiento académico que conlleva al fracaso escolar, así como a su reducción paulatina de sus relaciones sociales y una mayor dependencia social. Contra la adicción no hay recetas mágicas, contra las nuevas drogas digitales tampoco.

Lo más eficaz es lograr una buena educación digital, donde las redes sociales ocupen el papel que les corresponden de conexión social, de herramienta de conocimiento y de interrelación, pero siempre bajo control. Las redes sociales no son malas per se, aunque estén diseñadas para generar abuso en su utilización, sino que depende de la utilidad que se le dé. Controlar el tiempo a los más pequeños, seleccionar bien el contenido, disponer de otras alternativas de ocio y ajustar su uso a la edad y madurez del menor, son sistemas sencillos que da buenos resultados.

 

Tik Tok, superadictiva y los estereotipos de belleza

Aunque los estudios determinan que todas las redes sociales son susceptibles de generar adicción, muchos son los que marcan a Tik Tok como las más propensa a ello. Tanto por la necesidad de visualizar cada uno de los vídeos que en ella se alojan como entre los menores que se ven impulsados de sobremanera a generar contenidos. Los expertos consideran que los algoritmos que utiliza esta red social es extremadamente avanzado, de modo que ‘aprende’ qué le gusta al usuario cuando interactúa con el vídeo como cuando lo desecha. De modo que alimenta sin límite la atención humana, especialmente la de los más jóvenes que son más proclives a satisfacer sus impulsos inmediatos.

Tik Tok, como el resto de redes también genera efectos alternativos a la propia adicción. Uno de ellos tiene que ver con la valoración del menor, donde el rango se genera por la percepción falsa de ser reconocido socialmente en función de las interacciones del propio contenido que genera, los denominados ‘like’. De modo que, lograrlos o no lograrlos afecta a la autoestima, al papel social dentro del grupo de amigos reales, su reconocimiento social y su rol dentro del grupo.

Además, se genera una falsa realidad sobre el aspecto físico, gracias a la generación de diferentes herramientas y filtros que ofrecen las redes sociales, donde se transmuta el físico hasta lo irreal, se genera un mundo tan alternativo como falso, pero que termina por confundir al menor, que cada vez tiene más dificultades en diferencias entre lo real y lo generado por la red. El Gobierno de Castilla La Mancha ha editado un estudio en el que abordan estos y otros impactos entre la población adolescente.

Ello se está traduciendo en la imposición de un único modelo físico que atenaza y condiciona al menor, genera más dificultades entre los menores por aceptar su propio físico y en la generación de estereotipos hasta configurar una tiranía del cuerpo perfecto. Las drogas digitales requieren una mayor atención y sensibilización social donde los adultos, padres, profesores, cuidadores, etc… debe ser conscientes. Pero también evita caer en sus redes.

 

 

 

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies