Son muchos los papas que nos consultan sobre el sueño de sus peques. A veces como consulta principal o a veces entre las consultas con otros motivos. La semana pasada tuvo lugar la Jornada sobre el sueño, impartida por el Doctor Gonzalo Pin, organizada por la la Clínica Vistahermosa. Gracias a esta jornada recordamos aspectos importantes de la higiene del sueño de los niños.
El Sueño es muy importante en todo ser humano, ya que es uno de los principales motores para un correcto funcionamiento. Todos sabemos que si no dormimos lo necesario estamos flojos, cansados, irritables…por eso es primordial que nuestros hijos tengan unos buenos hábitos de sueño desde pequeños, porque son hábitos que pueden ayudarnos durante toda nuestra vida.
Por un lado tenemos que diferenciar un niño diagnosticado de TEA o TDAH, de un niño sin diagnóstico. Ya que los niños TEA o TDAH tienen peculiaridades en los patrones de sueño que son importantes destacar y tenerlos en cuenta para poder elaborar unas buenas pautas de sueño.
¿Qué podemos hacer para que duerman mejor?
En general, para todos los niños, podemos establecer unas pautas con las que vamos a conseguir una buena higiene del sueño:
1-No comer nada dos horas antes de ir a la cama.
Debemos intentar que los niños no coman nada dos horas antes de ir a dormir. Cuando comemos producimos cortisol, por lo que al ingerir alimentos cerca de la hora de dormir provocamos que ese cortisol esté elevado. Si hay cortisol, no hay melatonina (encargada de producir sueño).
2-La última ingesta antes de dormir puede ser la leche.
Que lo último que comamos se un vaso de leche ayudará a mejorar la conciliación del sueño ya que mejora la activación de la melatonina.
3-Evita la luz blanca dos horas antes de ir a dormir.
Debemos evitar que nuestros niños estén en contacto con cualquier dispositivo que emita luz blanca dos horas antes de irse a dormir. Nuestro cuerpo está diseñado para que cuando perciba luz blanca se active (similar a la luz de la mañana), y cuando percibe luz naranja se desactiva (similar a la luz del sol anocheciendo). Con la luz naranja nuestro cuerpo se desactiva a la vez que se irá activando la melatonina, encargada de producir el sueño. Esta melatonina tarda dos horas en llegar a su máximo nivel para poder dormir. Por este motivo debemos evitar las pantallas electrónicas, pues tienen luz blanca y van hacer que nos activemos y que nuestra melatonina no empiece a funcionar hasta pasadas dos horas de apagar estos dispositivos. Una fácil luz naranja puedes obtenerla con las lámparas de sal.
4-No les actives con actividades excitantes.
No debemos dejar a nuestros niños que realicen actividades excitantes a última hora de la tarde, ya que libera cortisol (activación) y no dejan actuar a la melatonina. Por este motivo dos horas antes de irnos a dormir debemos realizar actividades más tranquilas cómo leer un cuento o dibujar.
5-Realiza una rutina de sueño.
45 min. minutos antes de irnos a dormir, debemos realizar una rutina de sueño: lavado de dientes, preparamos la ropa del día siguiente y leemos un cuento. Pero debemos tener presente que durante la rutina nuestro tono de voz debe ser bajo y monótono. Los cuentos divertidos los dejamos para otro momento. De nuevo, intentaremos activar la melatonina.
6-No te asustes si duerme más cuando está malito.
Tienes que saber que durmiendo se activa el sistema inmunitario para combatir los gérmenes y también se activa la hormona del crecimiento. ¿Alguna vez has visto que tu hijo ha pegado un estirón cuando está malito? Es gracias a dormir.
7- Vigila la temperatura.
El cortisol de nuestro cuerpo baja si baja la temperatura, ya que estamos diseñados para dormir de noche cuando hace más frío. Por lo tanto es bueno que evites aires que no dejen bajar la temperatura del cuerpo.
8- Utiliza el contacto físico en la rutina del sueño.
El contacto físico es un valioso estímulo sensorial que les ayudará a conciliar el sueño. Para una buena rutina podemos leer un cuento con ellos cogidos de la mano. Después retírate en el momento del sueño.
Por otro lado, a continuación destacaremos unas peculiaridades del sueño que tienen los niños con diagnóstico:
La mayoría tienen dificultades de inicio del sueño, esto provoca más dificultades de conducta, más irritación, peor comunicación… Y se agravan los síntomas tea.
1-El 63% de los niños con tdah tienen trastorno del sueño: Estos niños al tener menos descanso son más impulsivos. La melatonina en los niños diagnosticados con TDA tiene una duración más corta, por lo que duermen menos. Muchos papás recurren al fármaco Melamil, que es melatonina en gotas, para poder así producir más melatonina y dormir más. Consulta a tu pediatra o a tu psicólogo para que hagan un estudio del sueño de tu hijo, para así saber cuándo administrarla, ya que no es igual y no hace el mismo efecto en todos los niños.
2-Con los niños con diagnóstico todavía es más necesario y beneficioso utilizar el contacto físico hasta que los niños alcancen el sueño, ya que necesitan un estímulo sensorial que les ayude a dormirse.
3-Si concilia bien el sueño, pero tiene durante la noche, muchos movimientos de piernas, habla en sueños o se despierta con pesadillas, es recomendable hacer una prueba de sueño para certificar que alcanza un sueño reparador y descartar otros diagnósticos asociados y muy frecuentes cuando se dan estos diagnósticos.
¿Cómo duermen tus hijos?, ¿Tenéis establecida una buena rutina de sueño?
Sheila Alcaraz
Psicóloga Infantil